Ofrenda

Ofrendo este día a la memoria,

al hábito de hurgar las ruinas de los vanos sueños.

Ofrendo mi ser compungido,

la mirada perdida

frente a los espectros del pasado.

Te di el futuro

la ingenua certeza de mis días completos

la vida erigida en actos cotidianos.

Hoy mis pies caminan en el asfalto caliente

de una ciudad atestada de ruidos,

emanan las sombras desvaídas entre el vaho de la tarde.

Ofrendo mi renuncia

pronto se borrarán los resquicios

en la indiferencia de tantas noches largas.

07/01/2021

Parsimonia

Aquí, insomne

te pido:

aplaza el sueño,

deja al mundo desplomarse,

quiero tallar en tu blancura

cuanto paisaje mis manos imaginen. 

¡No le des tregua a la noche!

Deja que se extienda

para poder tejerte entre mis dedos

para pulir con mi boca tus muslos

y reverdecer el espacio en el que te percibo,

absorto y conmovido

por el mundo concebido más allá de tu mirada.

Sucumbe erguido

consumada sea la combustión de los sentidos,

dile adiós al pensamiento

y muévete sin prisa.

Quiero yacer mojada de ti

al borde de la cama

-jadeando-

mientras se apaciguan las sábanas.

27/01/2021

De sueños inconclusos 

Sin querer que se duerma tu recuerdo

me doy cuenta de que me habitas

que veo tus ojos en una puesta de sol 

que te huelo al desgranar café 

y veo el paisaje de tu piel que formo con mis manos

He querido sentir todo lo que de ti quisiera 

he querido adueñarme de alguna de tus horas

y caminar juntos sintiendo en mis pies el vaivén de las olas

mientras me hablas de tu padre y su laboratorio

Me quedé atravesada con las ganas de 

tocar tu muslo cuando conduces

tomar tu mano andando en algún pasillo del supermercado

contemplarte alguna noche sin murmullos y sin pasado

sin que nada nos altere

Cuando escribo te veo a mi lado

entre bromas me dictas cada palabra.

Ya no distingo qué es realidad y qué es ficción

y me encuentro a mitad de la vida

a mitad de la página

donde escribo sueños inconclusos.

14/04/2017 

Invitación amorosa

Te invito a que burlemos la ceremonia del insomnio

rompamos su rutina de niña imperiosa

y las paredes respiren nuestros nombres,

te invito a darle sabor a tu vida con la sal de mis manos

sintiendo el hervor de mis músculos

en el zapateo del placer,

te invito de demoler de un tajo

la absurda edificación del prejuicio

y nos creamos perdurables,

te invito a que hagamos de este amor un huerto

para jugar en la enredadera de sus venas

comiéndonos el fruto de la injustificada existencia,

te invito a retener el tiempo en la felicidad

de cruzar la calle planteándonos hipótesis

de beber el café imperturbable,

te invito a rasgar las páginas blancas

hacer pliegues de mi silueta

y de mi sangre la pluma que escriba

el más bello poema.

Desenredando hilos

Se me ha ido la tarde pensando

creando barajas

jugando con las posibilidades,

yo sé que con vos quiero

destejer los hilos del amor.

¡Vamos, con vos yo sé que puedo!

Despuntemos hilo a hilo su argumento

descubramos que es motivo

y es certeza,

que para entenderlo

es necesario subir los escalones del tiempo

y apreciar el panorama.

¡Nos la tenemos que ingeniar para desanudar la trama!

Porque también crece la cizaña

a los días le nacen espigas

y la tierra erige picos

uno más empinado que el otro.

Quizá los hilos emburujados

se tornen infinitos y

no tengamos más alternativa

que besar la incertidumbre

discurrir en este mundo líquido;

sin embargo,

siempre habrá color entre las brumas

siempre estará

la risa de los muchachos

los arboles meciéndose

la luz refractada

las cuentas, los títulos

las hojas marchitas,

siempre contaremos

con ese mañana

que todavía no llega

con los hilos sueltos.